

De un tiempo a esta parte los Influencers se han multiplicado por obra y gracia de los Social Media. La mayoría se dedica a identificar tendencias, más o menos evidentes, y las surfea hasta la siguiente ola. Los hay buenos y malos, interesantes y nada interesantes. Es lo que hay y su influencia no parece tener un efecto destacable, más allá del mero entretenimiento, en nuestras vidas.
Me interesan más aquellos influencers: personas, empresas, tecnologías … cuya actividad si tiene un efecto transformador y positivo en el presente y el futuro, que no identifican la tendencia sino que la crean.
Los hay famosos, como Elon Musk, también grandes desconocidos y otros con menos encanto como Amancio Ortega, que conocemos más por sus hechos. Entre las empresas, tuve la suerte de trabajar durante más de 12 años para Nokia en España y, a pesar de su tibio presente, para mi sigue siendo referencia de empresa influencer, que modernizó un país: Finlandia y cambió para siempre la manera de comunicarnos, creando lo que hoy entendemos como movilidad, “Internet en el bolsillo” decíamos entonces.
El progreso es siempre una combinación de éxitos y fracasos. El caso de Control Data es aún más dramático porque entra en la categoría de “empresas antes de Internet” (a.d.i) y apenas queda rastro de ella. Llegó a tener cientos de miles de empleados y moneda propia, fabricaba desde estaciones de trabajo a superordenadores refrigerados por nitrógeno liquido y destacó en tecnologías de red IP en un “entorno transparente” y simulación 3D. Vendía hace 30 años un software, Alias, que hoy se sigue utilizando en el diseño y testeo digital de automóviles. Xerox es otro gran ejemplo, en su Xerox Park nacieron Ethernet, Adobe y el ratón. Sin ellas y otras más fugaces, como Digital o Atari, el presente sería menos apasionante.
Hoy los nuevos influencers aparecen en campos como la Genética, la bioinformática, la computación cuántica, la fabricación aditiva, la astrofísica, la sostenibilidad… Sus ideas e iniciativas alimentarán a los otros influencers, los de andar por casa.